09/04/2025 | Press release | Archived content
Las soluciones tecnológicas como riego inteligente, trazabilidad de extremo a extremo, sensores en campo y análisis de imágenes satelitales o de drones ya están disponibles en la región, y su implementación genera beneficios medibles desde el primer ciclo productivo.
El sector de agronegocios enfrenta desafíos crecientes como la inseguridad alimentaria, la volatilidad de precios, los eventos climáticos extremos y el aumento de regulaciones. Frente a este panorama, las herramientas tecnológicas ofrecen soluciones prácticas que ayudan a reducir desperdicios, optimizar procesos y elevar la calidad de los productos comercializados.
Sin embargo, esta transformación en el sector no ocurre de manera automática. Todavía persisten obstáculos internos, como la falta de una visión estratégica clara, las limitaciones presupuestarias, los sistemas tecnológicos obsoletos y la escasez de talento especializado. A estos desafíos se suman barreras externas, como la baja conectividad en zonas rurales y un ecosistema de innovación aún fragmentado.
Uso inteligente de datos para mejorar la toma de decisiones
La integración de soluciones tecnológicas en el núcleo del negocio agrícola redefine la manera de liderar y gestionar. Las empresas que adoptan este enfoque comienzan a tomar decisiones respaldadas por datos precisos, lo que fortalece su estrategia y les permite operar con mayor eficiencia, enfoque y visión a largo plazo.
A medida que el uso de datos y la información contextualizada se incorporan en los procesos productivos de una empresa, tanto las decisiones estratégicas como las operaciones tácticas evolucionan: se ajustan los calendarios de riego, se dosifican mejor los insumos, se organiza la logística con mayor precisión y se documenta el desempeño ambiental de manera sistemática.
El resultado es una mejora integral que se refleja en mayor productividad, mejor eficiencia operativa, reducción de riesgos y aprovechamiento de sinergias a lo largo de la cadena de valor. También se eleva la calidad de los productos y se fortalece el cumplimiento de estándares de sostenibilidad, lo que permite optimizar el uso de recursos escasos como la tierra, el agua y la energía.
BID Invest y el Hub de Transformación Digital para Agronegocios
Consciente del potencial y los desafíos que enfrenta el sector agropecuario, BID Invest actúa como catalizador de una adopción tecnológica más rápida, medible y escalable. Para lograrlo, combina servicios de asesoría especializada en transformación digital con alternativas financieras adaptadas al sector de agronegocios, facilitando la conversión de pruebas de concepto de soluciones digitales en programas tecnológicos robustos que escalen a nivel corporativo.
En este marco, BID Invest lanzó el Hub de Transformación Digital para Agronegocios, una plataforma de colaboración diseñada para acompañar a las empresas de extremo a extremo. El Hub realiza diagnósticos integrales, prioriza casos de uso, articula la oferta tecnológica con la demanda real e impulsa pruebas de concepto con métricas simples. Además, gestiona el cambio para desplegar a escala, complementando estas acciones con instrumentos de financiamiento que reducen riesgos y tiempos de implementación.
Innovación en marcha con inteligencia artificial
La inteligencia artificial (IA) se consolida como una aliada clave para mejorar la eficiencia y avanzar hacia una agricultura más sostenible. En América Latina y el Caribe ya existen casos exitosos, que demuestran el impacto real de esta tecnología. Por ejemplo, Kilimo, una empresa que utiliza datos masivos (big data) y aprendizaje automático para optimizar el riego. Sus algoritmos analizan variables como el clima y la humedad del suelo, generando recomendaciones sobre cuándo y cuánto regar, lo que permite ahorrar agua y mantener rendimientos estables a través de una gestión más eficiente de los recursos naturales.
Otras aplicaciones de la IA en la agricultura incluyen la detección temprana de plagas en imágenes y la estimación de rendimientos agrarios, que aportan consistencia operativa y trazabilidad verificable, con impacto directo en costos y menor presión sobre los ecosistemas.
Competitividad y sostenibilidad con visión de futuro
La transformación digital se ha convertido en la nueva "infraestructura" del sector de agronegocios en la región: ordena decisiones, moderniza operaciones y convierte la sostenibilidad en una ventaja económica tangible.
Gracias al Hub de Transformación Digital para Agronegocios y a las capacidades de asesoría y financiamiento de BID Invest, el sector privado cuenta ahora con una ruta práctica para modernizarse, ganar escala y competir con éxito hoy y en la próxima década, con una visión compartida de negocio basada en productividad, eficiencia y sostenibilidad.